Teletrabajo: ¿una consecuencia permanente de la crisis?

 

Una de las consecuencias de COVID 19 ha sido la migración masiva hacia el teletrabajo. Lo que para los empleadores era un formato sólo para algunos pocos colaboradores y una alternativa que no todas las organizaciones tenían el interés de explorar, se ha hecho indispensable en los últimos meses.

Un reciente estudio sobre el teletrabajo realizado por Search Latinoamerica que consideró empresas de Centroamérica, Colombia, Ecuador y República Dominicana, revela que un 58% de las empresas no contaban con modelos de teletrabajo implementados antes de la crisis del COVID19. Este alto porcentaje de organizaciones ha tenido que improvisar en tiempo récord  para mantener la continuidad de su operación de forma remota donde además al menos 8% de los empleados consideró no tener las herramientas necesarias para poder teletrabajar y 18% no cuentan con un espacio para trabajar desde su hogar. 

 
Search Latinoamérica
 

Más importante aún, de las empresas encuestadas 66% no tienen KPIs establecidos para evaluar a los empleados que hacen teletrabajo. Y es que trabajar en equipo de forma remota, requiere de un set de habilidades blandas específicas para mantener la calidad del trabajo, como el conocimiento de uso de herramientas tecnológicas, capacidad de organización, comunicación asertiva y autogestión, entre otras. La ausencia de estas habilidades es aún más notoria cuando las relaciones entre compañeros de trabajo y jefes con sus subordinados es totalmente a distancia. No es fácil para los equipos, especialmente si la cultura organizacional es disfuncional. Solamente 34% de las empresas encuestadas consideran probable seguir implementando el teletrabajo una vez finalizada la crisis. 

 
Search Latinoamérica
 

No sabemos cuánto tiempo durará la necesidad de mantener un distanciamiento social y con ello mantener el teletrabajo como formato prevalente. Lo que sí se puede suponer con algún grado de certeza, es que esta crisis obligó a las organizaciones a ‘lanzarse al agua’ con el teletrabajo, presentando una oportunidad de experimentar con su efectividad. Esto podría significar un futuro con más virtualidad permanente en el trabajo. Puede que estemos presenciando un cambio en la forma colectiva de trabajar; que si ademas de efectivo resulta en una disminución de costos operativos, no habría vuelta atrás.


 

Suscripción al Contenido

Anterior
Anterior

Cómo crear una agenda estratégica de crisis

Siguiente
Siguiente

Pensamiento Estratégico